Músicos chilenos y argentinos completaron la segunda versión de la cita que se convierte en la esperanza de contar regularmente con una muestra profesional de canto lírico en la provincia.
Un grupo de amigos, liderados por dos hermanos buinenses dedicados profesionalmente a la música en Buenos Aires, llevó a cabo en el verano del 2017 una muestra de canto lírico al aire libre, en la explanada que precede al Centro Cultural de Buin, en pleno centro, a un costado de la plaza de armas del pueblo. La recepción de esa primera versión fue buena, aunque, como es fácil imaginar, sin repercusiones en cuanto a la asistencia de público, sin justicia para los sueños que impulsaron su puesta en marcha y el esfuerzo realizado. La segunda versión, la de hace pocos días, contó con una notoria robustez de producción, una mayor difusión, asistencia significativa de público y resultados sin duda muy superiores, lo que hace pensar que fuimos testigos de una cita con enorme proyección en el tiempo.
La producción fue sin duda, cuidada. Se logró conformar una orquesta compuesta por cerca de cuarenta músicos profesionales, la mayoría de ellos muy jóvenes, buinenses o paininos, egresados hace poco de las universidades. Varios de ellos comenzaron en la música gracias a las orquestas juveniles y algunos dirigen ese tipo de agrupaciones. Esto permite vislumbrar a lo menos tres avances importantes en las últimas décadas: los resultados del modelo de orquestas juveniles, que han sido fuente de desarrollo para quienes de otro modo no hubieran descubierto la música, un mayor número de jóvenes dedicados a la música luego de recibir una sólida formación y la demostración de que es posible poner en marcha una orquesta sinfónica de calidad con músicos de la zona. La orquesta, en síntesis, muy bien.
La tecnología, hoy de fácil disponibilidad, permitió contar con un buen escenario e iluminación. Algo similar sucedió con la amplificación del sonido, aún cuando falta un mayor entrenamiento para el manejo de ese tipo de equipos y una locución que se ajuste más a lo habitual en este tipo de presentaciones, evitando entonaciones carnavalescas al momento de hacer las presentaciones.
Por otro lado, quedó en evidencia la gran falta que le hace a Buin una sala o un teatro dedicado a la música. Para quienes acostumbramos a escuchar orquestas, resulta muy extraño no escuchar los sonidos provenientes del instrumento, sino de una caja totalmente ajena a la música, esto es, un parlante (por más calidad que tenga).
Si esta vez alguien asistió por primera vez en su vida a una muestra de canto lírico, es muy difícil que no haya salido de la explanada del Centro Cultural de Buin totalmente seducido por la belleza. De eso no cabe duda. Quienes asistimos regularmente a la música, terminamos muy complacidos. A ello contribuyeron, sin duda, un repertorio muy bien seleccionado, el profesionalismo de los intérpretes, pero principalmente el “espíritu” o el “alma” de quienes ofrecieron la música, que establecieron una efectiva comunicación con el público y lo abordaron como “buenos vecinos”, con generosidad artística, sin falsas pretensiones, casi disimulando que durante el año integran el elenco estable de uno de los teatros más prestigiosos, como es el Teatro Colón de Buenos Aires.
Los solistas invitados fueron los siguientes:
Sonia Vásquez, Soprano (Chilena), Daniel González, Tenor (Chileno), Sabrina Sosa, Soprano (Argentina), Martín Benitez, Tenor (Argentino), Luz Suárez, pianista (Argentina), Nicolás González (Director).
Invitados especiales: Sonia Pino, ganadora del Festival de la Voz del Adulto Mayor de Buin 2017, Diego Martínez, guitarra eléctrica.
En lo extra musical, es destacable la notoria colaboración de la municipalidad de Buin, un fenómeno nuevo por estos lados, y la de la imprenta de partituras GM-Brüder Verlag, que desde Argentina aportó con una perfecta impresión de las partituras. Lamentablemente, estamos acostumbrados a la falta de interés que muestran en este tipo de iniciativas las tantas empresas que tiene sus sedes en la Provincia del Maipo.
Muy satisfechos, entonces, quedamos a la espera de la tercera versión de “Opera para todos”, que sin duda será igual o mejor que la de este año, y con la esperanza de su replicación en Paine, San Bernardo o Calera de Tanto, las otras comunas de la provincia.
Rodolfo Silva
Presidente Corporación Cultural Nuevo Horizonte de Paine