Opera y teatro, unidos en una valiosa obra.
Todos necesitamos saber cuál es nuestro hogar, el lugar al que pertenecemos, tanto en el ámbito familiar como en el social. Nos sentimos fortalecidos al reconocernos como partícipes de un conjunto de costumbres, hábitos alimentarios, fiestas, un idioma, etc. Por ello es que sentir que compartimos una historia, un punto de origen y una sucesión de hechos que nos condujeron hasta donde estamos hoy, resulta más una necesidad que una obligación. Todo aquello contribuye a lo que se llama “identidad nacional”.
Hasta fines de la década pasada, sin embargo, vimos como en la mayor parte del mundo, incluyendo Latinoamérica y nuestro país, se intentó restar importancia a la identidad nacional. En el ámbito de las artes, esto se abordó, por ejemplo, mezclando elementos culturales de distintas naciones. Pudimos ver obras de teatro donde se contaba una historia indígena latinoamericana y los personajes lucían máscaras propias del Carnaval de Venecia. Lo que parecía simple ignorancia, era en el fondo una maniobra de ingeniería social que buscaba borrar la idea de identidad nacional, quitar aquel punto de referencia que nos identifica.
Al comenzar esta década, sin embargo, el escenario parece estar cambiando. Las manifestaciones de revalorización de la idea de nación son cada vez más frecuentes. No me refiero al ámbito político, como ocurre en las elecciones europeas, por ejemplo, sino al social, aquel que se puede apreciar en el día a día. El caso de “Reddit Place 2022” parece ser bastante revelador. (Describirlo aquí tomaría más espacio del apropiado. Hay, sin embargo, bastante información al respecto en la web). ¿Qué hizo, me pregunto, que entre más de un millón de participantes de distintos países del mundo, la mayoría muy jóvenes, con perfil de “computines”, supuestamente alejados de la historia, hayan sido muchos los que prefirieron dibujar muy frecuentemente las banderas de sus países en medio variadas formas que incluían personajes ficticios, memes de internet, obra de arte famosas, etc.
En esto pensaba hace unos días en el Aula Magna Fundadores de la Universidad Central, antes de que comenzara “Los Indomables, musical de los Hermanos Carrera”.
Fui invitado por la soprano Ilse Simpfendorfer, quien fuera una gran colaboradora de la Corporación Cultural Nuevo Horizonte de Paine, hasta antes de irse a vivir a Rari, donde dirige la Corporación Cultural Espacio Rari.
“Los Indomables” es una obra de teatro musical que narra la apasionante, trágica y gloriosa vida de los cuatro hermanos Carrera, padres de la Patria Vieja.
Tres mujeres cercanas a los hermanos Carrera, Paula Verdugo (Ilse Simpfendorfer), Mercedes Fontecilla (Javiera del Real) y Ana María Cotapos, esposa de Juan José Carrera (Rebecca Bailey), narran los principales hechos de las vidas de los próceres. Desde el canto lírico se escucha la voz de los protagonistas: Doña Javiera (Cecilia Frigerio, Soprano), Don José Miguel (Juan Pablo Dupré, Tenor), Juan José Carrera (Sergio Gallardo, Bajo barítono) y Luis Carrera (Daniel Olmos, Tenor).
Son varias las virtudes de la obra.
Los textos son directos, sencillos, cuidados. El canto es en español. La narración se completa oportunamente. No olvidemos que una obra de teatro, una ópera, como todo arte, son actos de comunicación. En este caso, el mensaje llega con claridad al receptor del mensaje.
El contenido, el mensaje, extiende un simbólico lazo entre los hechos del pasado y la contingencia que vive nuestro país, lo que aleja la obra de ser una pieza de museo y, por el contrario, la transforma en una reflexión muy vigente.
El canto (muy bien ejecutado, por cierto) está a cargo de cantantes de primer nivel. Basta con ver el historial de cada uno de ellos.
Cecilia Frigerio es una soprano de reconocida trayectoria, diplomada en Canto Superior en el Conservatorio Luiggi Cherubini de Florencia, Italia, y participación en las más famosas óperas.
Sergio Gallardo (el más operático en esta obra) participa con frecuencia en los programas del Teatro Municipal de Santiago y es llamado desde las principales salas del país. En 2011 debutó en Europa como Don Bartolo, de El Barbero de Sevilla, en el Teatro del Capitolio, en Toulouse, Francia.
Juan Pablo Dupré, que combina presentaciones en Italia (reside en Módena) y Chile, ha sido galardonado con varios premios importantes durante su carrera, destacando en Italia el premio “Luciano Pavarotti”.
El tenor Daniel Olmos, aparte de cantar representando a Luis Carrera, es el compositor de la música y líder de la obra. Sus planes son convertir “Los Indomables” en un emblema del canto a figuras históricas. Piensa también en agregar elementos que le den mayor envergadura, como puede ser lo único que echamos de menos, una orquesta de cámara que toque en vivo.
Conviene destacar también el equipo de profesionales que apoya la puesta en escena: Orquestador, Director, Productores, así como la forma en que el área de Extensión de la Universidad Central ha enmendado rumbos de la mano de Franco Muzio.
Mientras aplaudo, me quedo pensando en cuánta falta hace que obras de este tipo sean presentadas en los colegios, en el Teatro de Paine, donde sea que haga falta recordar el lugar al que pertenecemos.
Rodolfo Silva
Corporación Cultural Nuevo Horizonte de Paine
Paine
Abril de 2023